miércoles, 28 de octubre de 2009

pienso


Solo por un segundo en mi vida, escapé del ajetreo diario, escapé de convivir con seres domésticos con mentes preparadas para actividades básicas. Escape del tal mundo lleno de mierda consumista y pasadizos en los cuales sabes como entrar, pero no sabes si algún día saldrás. Trate de mentalizarme en un lugar distinto a la realidad, y fijarme en las cosas simples de mi realidad. Trate de enfocar mi mente en lugares recónditos y desurbanizados en los cuales solo yo en cuerpo y espíritu logre alcanzar un estado de concentración para aunque sea una vez en mi vida conocerme a mi mismo. ¿Y que encontré? Encontré los más bellos jardines solo comparables con edén, encontré el punto en que el alma corre libre sobre praderas y luego reposa en suaves pétalos de rosa de hermosos colores. Encontré el lugar en donde mis pensamientos se focalizar en algo más que en cuentas, trabajos y rutina. Y solo pienso en que la realidad la construyo de una manera subjetiva y totalmente distinta a como comúnmente se le imagina. Descubrí que en realidad tengo sentimientos, y no soy solo esa vacía cáscara que todos tratan de tildar de una manera distinta. Me conocí a mi mismo, y en ese preciso instante descubrí que en realidad vivo…y por un momento, por un pequeño momento, sentí que mi cuerpo es mas que carne, sangre y cerebro, sentí que el alma y espíritu también tienen algo que decir, que no son solo para guardar y almacenar mis sentimientos y recuerdos, sentí que mi alma es algo mucho mas importante que tener que pagar el dividendo a fin de mes, comprendí que sentirme bien conmigo mismo, es mucho mas placentero que sentir que por fin terminé de pagar las cuotas. Y pensé que al dedicar un minuto, tan solo un pequeño y miserable minuto a mi mismo y no solo mi cuerpo sino también mi ser, por ese pequeño instante, puedo volar más alto que cualquier ángel y ser tan poderoso como yo mismo lo desee.

Y así como pude por un minuto conocerme a mi mismo, y escapar de la ruidosa y gris ciudad, con tan solo un parpadeo volví a mi rutinaria vida. Pero con otro fin, ese fin, solo yo lo puedo definir de manera tal de sentirme bien con mis pares, y por sobre todo, conmigo mismo.

sábado, 24 de octubre de 2009

desorden


Desorden, en realidad el desorden es tan simple entenderlo como "carencia de orden", y carencia de orden podría ser la mejor definición para mi habitación. Un chiquero, un basural o un corral se asemejarían bastante a mi cuarto, empezando por el espacio reducido y la gran cantidad de cosas y artículos innecesarios hacen de mi habitación un lugar donde encontrar un sitio para sentarte parece un lujo, empezando por las camisas, los pantalones los controles remotos, pañuelos, calcetas, botellas, medicamentos, colgadores de ropa y demases encima de la cama; desodorantes, de los 2 tipos ambientales y de piel, vasos, platos, cubiertos, lentes de sol, papeles higiénicos, cd's, velas, papeles, lapices mas medicamentos, y otra gran gama de cosas inútiles en el escritorio, y botellas, cajas, ropa sucia, basura y un enredo de cables en el suelo. puede sonar como una descripción demasiado básica, quizás me falto darme una vuelta por los cajones, o el armario, pero al fin y al cabo la idea principal es el tornado que pasó por mi pieza dejando todo fuera de lugar y en un perfecto caos.
pero la mente es tan sabia, que busca reflejarse hasta en las cosas mas insípidas de la vida, mi habitación simula mi mente, esa misma llena de pensamientos en un completo vacilar sin sentido, esa que sobrepone pensamientos de goce personal por sobre pensamientos de honor o lealtad, esa mente que cruza lo racional con lo pasional dejando confusiones que los sentidos no saben explicar, pero si demostrar, y acudimos al llanto, o muchas veces a la risa, la ira, el amor o situaciones que no se pueden explicar mas que con la sola vivencia, o muchas veces la mente nos juega pasadas raras como en la clase de matematicas donde estamos in situ pero nuestra mente se encuentra en aquella persona que viste en la locomoción colectiva. o los hilares de ideas como cuando comienzo hablandote del auto que era plateado, sin embargo te fijaste quien iba en su interior era el negro rivas, el que se rompio la pierna jugando el partido que termino 2 a 2 en alargue porque hicieron el gol en el ultimo minuto un cabro que estudia en la universidad y asi blablabla... sucecivamente.
el punto es, el poder de la mente, de hacernos ver como somos por el interior, de reflejarnos en actos tan simples como una mirada, la forma en que nos vestimos, o que tan ordenados somos o no, en mi caso, soy un completo caos, una infinidades de ideas sin orden, un sin fin de imágenes y recuerdos en la película de mi memoria, mis pensamientos giran sin un eje establecido, rebotan y chocan y colisionan y se mezclan y me hacen sentir cómodo de esa manera, no busco el ser perfecto, sino la perfección del ser tal y como es.
somos lo que somos, somos lo que pensamos, lo que pensamos lo reflejamos, y lo que reflejamos es lo que realmente somos.
25/10/2009